Son muchas las personas que disfrutan de viajar al extranjero cuando tienen oportunidad, ya sea para romper con la rutina, conocer nuevos sitios, culturas, tradiciones, o por la gastronomía. En este contexto, son más de 900 millones de turistas los que realizaron viajes internacionales en 2022, según la Organización Mundial del Turismo, y se prevé una cifra incluso mayor para este año.
Millones de personas buscan viajar a otros países para perderse por sus calles, comer su comida, sentirse de ese propio país, ver con sus ojos lo que les han contado o intentar comunicarse con los lugareños. Los beneficios son muchos: aumenta la tolerancia y el respeto a lo desconocido, disminuye el estrés y la ansiedad, favorece las relaciones sociales, se valora más lo que se tiene, se superan miedos, aumenta la empatía y los niveles de felicidad, etc.
Pero, viajar el extranjero presenta un problema que en ocasiones hace que nos sintamos perdidos o confusos: el idioma. El inglés se ha convertido en el idioma más hablado del mundo, con más de 1.400 millones de hablantes, según la Oficina Nacional de Estadística de Reino Unido. A pesar de ello, en España solo un 14,7% de personas hablan bien inglés, según una encuesta del Instituto Nacional de Estadística. Son muchas las personas que deciden no viajar al extranjero por miedo a no entender la lengua y sentirse desorientados.
Para solucionar este problema, Vasco Electronics ha trabajado en un dispositivo capaz de traducir textos, fotos y audios hasta en 108 idiomas diferentes, Traductor V4. Así se podrá poner fin a todos los problemas derivados de la falta de comprensión de un idioma tanto oral como por escrito.
Disfrutar de actividades culturales
Ir a un país en el que se esté estrenando una obra de teatro o una película que te gustaría ver pero no poder entrar porque no entiendes el idioma, o visitar un museo y no entender lo que explican en la descripción. Estos son problemas bastante comunes en algunos países o en áreas no tan turísticas en las que las guías no están traducidas a todos los idiomas. Este problema puede generar una gran sensación de frustración y puede producir que cualquier turista que desconozca el idioma del país de destino desista de organizar un viaje que le pueda aportar una experiencia trascendental por el simple hecho de no hablar el idioma.
Aunque se hayan estudiado algunas expresiones, el hecho de no poder comprender el lenguaje del país impide disfrutar de esos actos culturales tan atractivos para cualquier turista.
Interacción con la comunidad local
El idioma ejerce una gran barrera de separación entre los turistas y los locales de cualquier lugar que visiten. Frecuentemente, en las zonas más turísticas, el personal de los restaurantes y hoteles sabe inglés, pero no todas las áreas son muy turísticas y no todas las experiencias que ofrece un país están relacionadas con la gastronomía y los hoteles. Este impedimento dificulta conocer el país en profundidad y, por lo tanto, extraer del viaje todas las experiencias posibles, ya que el viajero solo comprará y comerá aquellas cosas que se venden orientadas al turismo.
Un ejemplo de ello es pasear por las calles de algunas ciudades italianas y descubrir que, aunque no haya nadie en casa, las luces permanecen siempre encendidas. Si no se conoce a nadie allí no se puede saber que el motivo es para espantar a los ladrones. La barrera idiomática también puede hacer que el turista se pierda conocer un pueblo encantador o una cala cercana que únicamente conocen los locales.
Confusiones innecesarias
La barrera idiomática no sólo afecta a la hora de vivir una experiencia más en profundidad, sino que también puede provocar situaciones incómodas como pedir la comida incorrecta en un restaurante local que no tenga una variedad lingüística muy amplia en sus cartas, o puede incluso llevar a decir una frase erróneamente traducida que sea desagradable para el interlocutor.
Todo este tipo de situaciones tan violentas son fácilmente evitables si se disponen de las herramientas adecuadas.
La solución para evitar estos problemas
Las barreras idiomáticas pueden suponer una gran fuente de problemas en viajes internacionales, pero actualmente existen soluciones tecnológicas que permiten romper esas barreras y disfrutar de una gran experiencia con mayor libertad y seguridad.
Este es el caso del Traductor V4 de VA que permite la comunicación hasta con el 90% de la población mundial gracias a su soporte en 108 idiomas, incluyendo también dialectos. Este software está compacto en una pantalla de 5 pulgadas, que es fácil de transportar para poder sacarla del bolsillo en cualquier situación que sea requerida.
Este nuevo dispositivo permite la traducción tanto de audio, como de imágenes y textos. Además, funciona con GSM y contiene una tarjeta SIM que proporciona Internet gratis de por vida al usuario en casi 200 países sin ningún tipo de suscripción. Esto permite que el viajero no necesite depender de una señal WiFi y pueda viajar con comodidad en cualquier destino donde la señal WiFi no sea tan buena, y donde los nativos sólo hablen el idioma local y no haya diversidad de carteles en varios idiomas.