Securitas celebra 90 años de legado e historia, recordando los hitos que han marcado su trayectoria hasta convertirse en líder del sector, y centrándose en tres pilares: valores sólidos, tecnología innovadora y una cultura que siempre pone a las personas en primer lugar.
«Estos 90 años de trayectoria son inéditos en el sector de la seguridad privada y son producto de una forma distinta de hacer las cosas. Seguimos en una estrategia de transformación continua, invirtiendo en tecnología y basándonos en el nuevo talento, capacidades y conocimiento adquiridos durante los últimos años para proporcionar a nuestros clientes modelos de protección a medida y basados en tecnología que abarcan no solo la seguridad, sino también otros procesos fundamentales para la continuidad del negocio», explica Zacarías Erimias, consejero delegado de Securitas Seguridad España.
Fundada en Helsingborg (Suecia) en 1934 por Erik Philip-Sörensen, Securitas nació como una empresa de vigilancia nocturna tradicional y ha evolucionado hasta convertirse en un líder global de soluciones de seguridad.
Ya a mediados de la década de los 40, Securitas empezó a integrar la tecnología en soluciones para sus clientes, creciendo rápidamente tras la Segunda Guerra Mundial. En este sentido, Securitas fue pionera en el control automático de accesos, e hizo historia al lanzar el primer cajero automático del mundo conectado en línea en 1968. Al elevar la presencia y la experiencia humanas con la tecnología, Securitas ha ayudado a sus clientes a centrarse en su actividad principal, un desarrollo continuo que sentó las bases de lo que hoy es Securitas.
Desde 1958, el fundador Erik Philip-Sörensen tuvo la previsión de establecer los valores de integridad, eficacia y servicio de Securitas, documentándolos en el libro «Código de conducta para vigilantes», con el fin de proteger la profesión y garantizar su integridad. Para ello, hizo hincapié en la importancia del desarrollo continuo de los estándares, reconociendo que es un trabajo que nunca termina.
En la década de los 80, el entonces CEO de la compañía, Melker Schörling, hizo hincapié en la simplificación, la orientación al cliente y la expansión internacional, impulsando el crecimiento de Securitas en Europa, Estados Unidos y otros países mediante adquisiciones estratégicas. La desinversión en negocios no esenciales permitió a Securitas volver a centrarse en servicios de seguridad especializados, manteniendo su compromiso con la excelencia operativa y los valores fundamentales a lo largo de su expansión mundial.
«Vivir nuestro propósito de ayudar a hacer del mundo un lugar más seguro, no solo tiene un impacto muy positivo en nuestros clientes, sino también en el mundo en general», afirma Magnus Ahlqvist, presidente y CEO de Securitas. «Los líderes que encarnan nuestros valores atemporales han dado forma a nuestra cultura y han mantenido un compromiso con la excelencia. Con nuestro enfoque en la mejora continua y la innovación, estamos en mejores condiciones que nunca para hacer frente a las necesidades cambiantes de nuestros clientes y del panorama de la seguridad en general».
Ya en la década de los años 30, Philip-Sörensen reconoció que las personas bien formadas y con una clara brújula profesional podían influir positivamente en todo un sector. Al invertir esfuerzos en la estrategia de expansión, en comprender a los clientes y en mantener la curiosidad por lo que estaba por venir, sentó las bases de lo que se ha convertido en una compañía de seguridad líder mundial.