Lenovo (HKSE: 992) (ADR: LNVGY) ha alcanzado el hito de fabricar y distribuir un millón de estaciones de trabajo y servidores desde sus instalaciones de producción construidas a medida en Europa, tras poco más de un año de su puesta en funcionamiento en Budapest, Hungría.
Después de 10 meses de obras durante la pandemia, la planta abrió en junio de 2022 para dar soporte a clientes de toda Europa, Oriente Medio y África (EMEA) y responder a las necesidades de infraestructura de servidores, sistemas de almacenamiento y estaciones de trabajo PC de alta gama. A fecha de junio de 2023, la fábrica ha proporcionado soluciones a más de 1.000 clientes de 69 países, al tiempo que su escala y ritmo de operaciones se han acelerado a lo largo del último año. Durante este tiempo, más de 180 clientes han visitado la ubicación, lo cual ha facilitado una mayor colaboración, transparencia y comunicación con los clientes de Lenovo en toda la región EMEA.
Szabolcs Zolyomi, Responsable de Fábrica de Lenovo, comentó: «Inaugurar la fábrica en Hungría representó un hito muy importante para Lenovo, puesto que extendió nuestras operaciones de producción internacionales, proporcionando acceso a un potencial económico muy significativo para los sectores público y privado en el país. El logro de distribuir un millón de unidades constituye una muestra de la colaboración interna y externa que hemos mantenido con empleados y clientes durante este último año. Hemos sido capaces de responder a las necesidades de los clientes de forma más efectiva, con mayor eficiencia y control sobre el desarrollo de los productos y las operaciones de la cadena de suministro, y todo ello mientras hemos seguido manteniendo nuestro compromiso con la sostenibilidad y apoyando a la comunidad local».
Desde su apertura, el equipo de la planta ha crecido en un 20%, y en ella están representadas actualmente 15 nacionalidades diferentes. Además, Lenovo ha obtenido el reconocimiento por parte del Ministerio de Comercio Internacional de Hungría como el mayor generador de puestos de trabajo en el país. A través de la Fundación Lenovo, la rama filantrópica de la compañía, la fábrica colabora formalmente con la comunidad local para facilitar labores de voluntariado y tecnología para las escuelas locales, además de participar en donaciones de sangre mensuales en colaboración con la Fundación de la Cruz Roja en Hungría.
Las instalaciones de fabricación de Budapest fueron construidas pensando en la sostenibilidad y desde su inauguración se ha mejorado el aislamiento térmico, completado la instalación de sistemas sensores de iluminación y optimizado la utilización del calor residual de los compresores de aire. También se ha iniciado la segunda fase de la instalación de paneles solares para aumentar la capacidad hasta 4 megavatios, lo cual producirá la electricidad equivalente a aproximadamente 12 camiones cisterna de gas natural. Durante el transcurso del año, el calor generado en las labores de fabricación se aprovecha para mantener el calor del espacio, mientras que, en invierno, el aire frío del exterior se emplea para la refrigeración y ya se ha planificado expandir este proceso al resto de la fábrica. La reutilización del calor de este modo ha permitido reducir el gasto energético en un 14%.
Con el objetivo de alcanzar las emisiones netas cero de gases de efecto invernadero en toda la cadena de suministro para el ejercicio 2049/50, Lenovo ha reducido sus emisiones de CO2 en los envíos en más de un 90% mediante la reducción de las distancias de transporte, gracias a la ubicación de la fábrica en el corazón de Europa. Este hecho, combinado con los innovadores procesos de fabricación, como el método de soldadura a baja temperatura patentado por Lenovo, ha contribuido a los esfuerzos de la empresa en pos de alcanzar sus objetivos climáticos basados en la ciencia.
Como proveedor líder en la lista de superordenadores TOP500 durante los últimos cinco años, Lenovo ha continuado dando servicio a los clientes que operan algunos de los mayores superordenadores de Europa, con capacidades añadidas en las instalaciones de Hungría. Entre ellos se incluye el Centro de Supercomputación de Barcelona en España, el Centro de Supercomputación de Leibniz en Alemania y SURF en Países Bajos, además de muchas otras instituciones de informática de alto rendimiento. La fábrica de Hungría forma parte de la red de producción global de Lenovo, distribuida entre 35 ubicaciones de ocho regiones para dar servicio a clientes en 180 mercados, incluyendo Argentina, Brasil, China, Hungría, India, Japón, México y EE.UU. Lenovo ha sido ampliamente reconocida por su modelo híbrido de fabricación global que incluye una mezcla de producción en sus propias instalaciones y las de terceras partes.