Filmin estrena el próximo viernes 24 de mayo la película «Las cuatro hijas», dirigida por la tunecina Kaouther Ben Hania («El hombre que vendió su piel»). Se trata de una curiosa mezcla de ficción, metaficción y documental que nos presenta a Olfa Hamrouni, matriarca de una familia eminentemente femenina golpeada por la tragedia: dos de sus cuatro hijas desaparecieron para unirse a combatir en el ISIS. Poniendo en pie un atractivo artefacto narrativo, la película acaba siendo algo así como el making of de una ficción que jamás llegará a realizarse, en el que Olfa y sus hijas Eya y Tayssir hablan con las actrices que van a protagonizar esa ficción y les cuentan los episodios más dramáticos de su vida. El personaje de Olfa se duplica al ser interpretado por la popular actriz Hend Sabry («Los silencios del palacio»), Eya y Tayssir se interpretan a si mismas, y Nour Karoui e Ichraq Matar encarnan a Rahma y Ghofrane, las dos hermanas desaparecidas. Para completar el reparto, Majd Mastoura («Un diván en Túnez») representa a todos los personajes masculinos que entran en acción.
La directora conoció la historia de esta familia tras descubrir a Olfa en una emisora de radio. Su idea inicial era rodar un documental al uso sobre ella y sus hijas, pero algo no funcionaba: «Desde el momento en que puse en marcha la cámara, Olfa empezó a interpretar un papel concreto. Interpretaba, con gran talento trágico, el papel de la madre afligida, histérica, que se siente culpable. Ahora bien, esos rasgos casi nunca permiten explorar las diversas dimensiones de un individuo. El papel del cine es explorar esas zonas, esas ambigüedades del espíritu humano», recuerda.
Ben Hania dejó aparcado el proyecto para rodar «El hombre que vendió su piel» (nominada al Óscar a la Mejor Película Internacional), para coger distancia y retomarlo varios meses después. Introdujo un cambio crucial: «Comprendí que la mejor manera de volver a situar a Olfa en el dominio de la realidad y de sus propios recuerdos era hacer un documental sobre la preparación de una falsa ficción que nunca vería la luz. Olfa necesitaba enfrentarse a actores profesionales. De ahora en adelante, ellos serían los actores, no ella. Servirían para abrirle los ojos a Olfa y a sus hijas y ayudarlas a encontrar su verdad interior». La matriarca, que había sido calumniada, criticada e insultada cuando empezó a conceder entrevistas, tenía ahora la oportunidad de dar a conocer su historia de la mano de una gran actriz.
La película se toma diversas licencias. Un solo actor interpreta a todos los hombres que aparecen en un film filmado íntegramente en un decorado muy poco detallado, un gran hotel abandonado en el que transcurre toda la historia y que recuerda al decorado de «Dogville» de Lars Von Trier. Y existe un juego muy consciente entre realidad y ficción, verdad o invención. «En el cine podemos mentir si con ello logramos extraer una verdad profunda», afirma la directora.
«Las cuatro hijas» concursó en Sección Oficial en el Festival de Cannes, donde ganó el Ojo de Oro al Mejor Documental de la edición. Además, representó a Túnez en la carrera por el Óscar a la Mejor Película Internacional, ha ganado el César al Mejor Documental y fue nominada al Óscar al Mejor Documental que acabó ganando «20 días en Mariúpol». Caramel la estrenó en cines en España el pasado mes de febrero.