Filmin estrenará el próximo 3 de mayo “La memoria infinita”, película nominada al Oscar al Mejor Documental en los últimos premios de la Academia de Hollywood. Se trata de la quinta película de la directora chilena Maite Alberdi, quien ya recibió una nominación al Oscar en 2020 por “El Agente Topo”. Si en esa ocasión la directora se inmiscuyó en una residencia de la mano de un abuelo espía, esta vez nos muestra la dolorosa pero bellísima historia de amor de 25 años entre Augusto Góngora y Paulina Urrutia cuando a él le diagnostican Alzheimer. Durante 4 años, Alberdi siguió el día a día de Augusto, destacado periodista cultural chileno que luchó clandestinamente contra el régimen de Pinochet, y a Paulina, prestigiosa actriz y que fue Ministra de Cultura, así como los diálogos entre ambos sobre la reconstrucción de la memoria y la identidad y sus temores al día en que Augusto ya no reconociera a Paulina.
Sobre la génesis de la película, Alberdi explica: “Un día hice una presentación en la Escuela de Teatro de la que Paulina era la directora. Mientras hacía la presentación, me di cuenta de que Augusto estaba en la sala. Él ya tenía Alzheimer, y vi cómo ella lo hacía parte de su trabajo y de su vida. Él la acompañaba y ella lo dejaba participar, interrumpir, no se avergonzaba, incluso disfrutaba de tenerle ahí”. A partir de entonces, empezó este viaje incierto, una especie de diario filmado que captaría esta gran historia de amor que reinventa su relación cada día: “es un amor donde lo importante no es lo que fueron, sino lo que son hoy, y que se tienen el uno al otro”.
Durante los últimos días de la dictadura, Góngora publicó “Chile, la memoria prohibida”, una investigación en la que sentenció que “necesitamos reconstruir nuestra memoria emocional”, haciendo referencia a la memoria colectiva de Chile y a la importancia de recordar quienes dominaron el país durante mucho tiempo y sus consecuencias. A lo que Alberdi añade: “Es la misma (memoria emocional) que él conserva en su batalla diaria por no olvidar, y que le lleva a recordar lo más importante de su vida: quién es Paulina y lo que siente hacia ella. (…) Gracias a ellos empecé a recordar lo que es esencial”.