The Harmony Codex, el primer álbum musical del conocido artista británico, Steven Wilson, ha sido mezclado en audio inmersivo Dolby Atmos. Una innovación tecnológica de sonido que ha revolucionado la manera de crear y disfrutar de la música como nunca antes.
Steven Wilson es músico y productor británico, nominado cinco veces a los premios Grammy, y especialmente conocido por ser el fundador, vocalista, guitarrista y compositor de la banda Porcupine Tree. Ahora, con The Harmony Codex, el que es sin duda uno de los artistas británicos más singulares vuelve en solitario con un trabajo muy conceptual.
Harmony Codex estará disponible con sonido inmersivo Dolby Atmos, a través de Virgin, el día 29 de septiembre en las plataformas de música en streaming Apple Music, Amazon Music y TIDAL.
Sobre The Harmony Codex
The Harmony Codex no se parece a ningún otro disco que vayas a escuchar este año. Fascinante, revelador y bello, The Harmony Codex es el inabarcable séptimo álbum de uno de los artistas británicos más singulares.
Escuchar The Harmony Codex es como perderse en un dibujo de Escher hecho de sonido. A través de sus diez pistas, Steven Wilson recorre una maraña de recuerdos y nos va guiando por caminos habitados por las alargadas sombras de la reflexión, la meditación y el arrepentimiento.
Este códice es un vivo tapiz concebido y creado por el artista, que ha trabajado en solitario en el estudio que se ha montado en el garaje de una casa en el norte de Londres. Entre sus colaboradores se cuentan músicos del todo el mundo, con habituales como Ninet Tayeb, Craig Blundell y Adam Holzman y primerizos como Jack Dangers de Meat Beat Manifesto y Sam Fogarino de Interpol. Cada artista invitado ha podido darle su toque personal al disco. Su selección de baterías, cuerdas y sampleos se han ido intercalando para crear la música con la que arranca el viaje.
Y menudo viaje. The Harmony Codex va evolucionando a lo largo de sus 65 minutos, desde Inclination —un tema basado en un ritmo constante tan mecánico como militar, sobre el que se van añadiendo elementos aparentemente incongruentes hasta dar rienda suelta a un alma digital implacable. A partir de ahí, el disco va cogiendo fuerza con un tema acústico melancólico (What Life Brings) antes de dar paso a los tambores tribales y a una línea de bajo subsónica (Beautiful Scarecrow). Según va avanzando, los loops de batería se van dando la mano con acordes de guitarra góticos y sinuosos (Actual Brutal Facts), los ritmos electrónicos más frágiles se van abriendo como la luna asomándose entre las nubes (Economies of Scale) e infinidad de instrumentos interpretan un triple salto mortal en el que se combinan géneros y sonidos durante diez minutos (Impossible Tightrope). La letra vuelve una y otra vez a ese mapa de recuerdos, a esas sombras tan alargadas.
Si bien The Harmony Codex contiene guiños al pasado reciente de Steven Wilson, con el ruido paranoico de Insurgentes (2008), la electrónica cristalina de The Future Bites (2021) y la dominante narrativa de The Raven That Refused To Sing (and Other Stories) (2013), con este disco ha creado algo único, que sobrepasa el concepto de género. Y aunque The Harmony Codex está pensado para el audio espacial, no necesita de un sistema de sonido avanzado para ofrecer una experiencia extracorporal: bastan dos altavoces y una mente abierta.
The Harmony Codex:
- Inclination
- What Life Brings
- Economies of Scale
- Impossible Tightrope
- Rock Bottom
- Beautiful Scarecrow
- The Harmony Codex
- Time Is Running Out
- Actual Brutal Facts
- Staircase