Con motivo del Día Europeo de la Prevención del Cáncer de Piel, GenesisCare, compañía líder internacional en tratamientos oncológicos, recuerda la importancia del diagnóstico precoz de la enfermedad, especialmente con el aumento de la incidencia del cáncer de piel no melanoma en España. Según datos de la AECC, el cáncer de piel no melanoma en forma de carcinoma de células basales es la forma más frecuente de cáncer de piel, significando entre un 80%-90% de los carcinomas cutáneos, y el carcinoma de células escamosas es el segundo cáncer de piel más frecuente, ya que supone hasta un 20-25% de los tumores malignos cutáneos.
El cáncer de piel cuenta con dos tipos: melanoma y no melanoma. Los cánceres de piel no melanoma son más comunes que el melanoma y se desarrollan entre las células superiores de la piel, los dos tipos son el carcinoma de células escamosas (CCE) y el carcinoma de células basales (CCB). En ese sentido, desde el año 2020, los carcinomas de piel en España tienen una tasa de incidencia de 47 casos por cada 100.000 habitantes al año y especialmente los carcinomas de células basales y escamosas, con 253 y 38,16 casos por cada 100.000 personas al año, respectivamente.
Ante estos datos y de cara a la entrada al verano, el Dr. David Esteban, oncólogo radioterápico de GenesisCare, recuerda la importancia de las revisiones periódicas, la prevención y evitar exponerse al sol. “El cáncer de piel no melanoma es uno de los tipos de cáncer de piel más frecuentes. Suele aparecer en las zonas más expuestas al sol como la cara, el cuello, las manos y los brazos, afectando la epidermis, la capa más externa de la piel. Por ello es tan importante la revisión constante y acudir al médico al notar cualquier cambio en la piel, como una lesión que no cicatriza, que crece rápidamente o que sangra fácilmente, solo así se conseguirá un diagnóstico precoz lo antes posible para empezar con el tratamiento cuanto antes.”, asegura el doctor Esteban.
Asimismo, la exposición al sol es el principal factor de riesgo para desarrollar cáncer de piel no melanoma. Por lo tanto, es importante tomar precauciones para proteger la piel. Se recomienda limitar la exposición al sol en las horas pico, entre las 12 del mediodía y las 4 de la tarde. Además, se debe utilizar protector solar con un factor de protección solar de amplio espectro (UVA-UVB) adecuado, preferiblemente mayor al factor 30, y aplicarlo en todas las áreas expuestas de la piel.