En España, alrededor de 1,5 millones de vehículos circulan con neumáticos en mal estado, un dato alarmante que emerge de un estudio llevado a cabo por el Real Automóvil Club de España (RACE) en colaboración con Goodyear. Este estudio destaca la magnitud del problema y alerta sobre los graves riesgos de seguridad que conlleva, tanto para los conductores como para el resto de los usuarios de las vías. No en vano, Euromaster estima que hasta un 30% de los accidentes que ocurren en invierno podrían estar relacionados con el mal estado de los neumáticos, una cifra que cobra especial relevancia en una época del año en la que las condiciones climáticas hacen que las carreteras sean aún más peligrosas.
Así, su correcta revisión y mantenimiento es vital para la seguridad vial. Los neumáticos son el único punto de contacto entre el vehículo y la carretera, lo que significa que su estado afecta directamente a la capacidad de frenado, el agarre en condiciones de lluvia y el control del vehículo en curvas y maniobras repentinas.
Los datos aportados por RACE y Goodyear reflejan que este problema no solo se circunscribe a los vehículos antiguos. Cada vez es más común que los neumáticos defectuosos se encuentren en vehículos que no superan los cinco años de antigüedad, una tendencia que se debe, en parte, a la falta de revisión periódica de estos elementos críticos. La normativa de circulación en España exige que todos los vehículos circulen con neumáticos en buen estado, ya que el incumplimiento puede derivar en sanciones económicas. Concretamente, la multa es de 200 euros por cada rueda defectuosa, un importe considerable que, además de penalizar, pretende concienciar sobre la importancia de mantener los neumáticos en condiciones óptimas.
Entre las principales causas del deterioro de los neumáticos se encuentran el desgaste natural, el uso prolongado, las condiciones meteorológicas adversas y la falta de mantenimiento preventivo. Los neumáticos también pueden verse afectados por una presión inadecuada, que desgasta irregularmente la superficie y puede derivar en pérdida de adherencia.
Consejos prácticos para mantener los neumáticos en buen estado
Con el objetivo de reducir los accidentes relacionados con neumáticos en mal estado y mejorar la seguridad vial en general, Wabi ofrece algunos consejos prácticos para el correcto mantenimiento y revisión de los neumáticos:
1. Revisar la presión de los neumáticos regularmente: la presión adecuada de los neumáticos es fundamental para garantizar el rendimiento y la seguridad del vehículo. Un neumático inflado incorrectamente puede desgastarse de forma desigual y provocar una menor adherencia al pavimento, lo que aumenta el riesgo de accidente. La recomendación es verificar la presión de los neumáticos una vez al mes y ajustar conforme a las especificaciones del fabricante del vehículo.
2. Controlar la profundidad del dibujo: la normativa española establece que la profundidad mínima del dibujo de los neumáticos debe ser de 1,6 milímetros. Sin embargo, por seguridad, es recomendable que esta profundidad no sea inferior a 3 milímetros, especialmente en invierno. Un dibujo desgastado reduce la capacidad del neumático para evacuar agua e incrementa el riesgo de aquaplaning, por lo que se pierde adherencia en condiciones de baja fricción.
3. Inspeccionar visualmente los neumáticos: realizar una inspección visual de los neumáticos puede ayudar a detectar señales de desgaste irregular, grietas o bultos, que podrían indicar un problema mayor. Cualquier irregularidad en el neumático puede comprometer su integridad y es una señal de que es necesario acudir a un taller para una revisión profesional.
4. Equilibrado y alineación: estos servicios son clave para prolongar la vida útil de los neumáticos. Si los neumáticos no están bien equilibrados o si la alineación del vehículo es incorrecta, el desgaste puede ser irregular y prematuro. Es recomendable realizar el equilibrado y la alineación cada 10,000 kilómetros o cuando se realicen cambios importantes en el vehículo, como sustituir los neumáticos.
5. Rotar los neumáticos regularmente: la rotación de los neumáticos entre el eje delantero y trasero es importante para asegurar un desgaste uniforme. Esto es especialmente recomendable si el vehículo es de tracción delantera, donde los neumáticos delanteros suelen desgastarse más rápido. La rotación debe hacerse cada 10,000 kilómetros o según las recomendaciones del fabricante.
En conclusión, el mantenimiento adecuado de los neumáticos no solo previene sanciones económicas sino, sobre todo, reduce el riesgo de accidentes en la carretera. Invertir en la revisión y sustitución de neumáticos cuando sea necesario es una acción fundamental que todos los conductores pueden realizar para garantizar su seguridad y la de quienes les rodean. Cuanto mejor se mantengan, con menos frecuencia habrá que sustituirlos. Aun así, habrá que hacerlo en algún momento. Como norma general, los fabricantes afirman que es recomendable cambiarlos cada 45.000 Km o cada diez años. Esto supone un coste de unos 350 euros si son gomas de verano, y de hasta 450 euros si equipamos ruedas all season. Sin embargo, gracias a servicios de coche por suscripción como el que ofrece Wabi, el usuario no se tiene que preocupar ni del mantenimiento ni de la sustitución, pues están incluidos en la cuota mensual sin coste añadido.